Por James R. Haj, presidente y director ejecutivo de The Children's Trust
Los efectos en un niño de imágenes y vídeos sobre conflictos globales pueden ser más angustiosos que para los demás. Los niveles de estrés pueden aumentar fácilmente si los niños están expuestos a un aluvión de mensajes de medios, y a estos seguirán posiblemente síntomas de ansiedad o depresión. Lo ideal sería que los padres y cuidadores se percataran de cómo estas situaciones pueden afectar el bienestar emocional de sus hijos, y cuándo decidir si debe reducirse la exposición y ofrecer explicaciones, apropiadas a su edad, sobre lo que acontece.
Los padres conocen mejor a sus hijos. Considera las personalidades y características individuales de los niños al decidir cómo abordar estos temas difíciles. Aun así, hay algunas cosas que todos los adultos pueden considerar al comunicarse con los niños sobre situaciones complejas:
¡Mira lo que ellos ven!
Con las redes sociales y el ciclo de noticias de 24 horas presionando a niños cada vez más pequeños, los padres deben estar conscientes de lo que ven sus hijos y cómo eso les afecta. Los niños más pequeños pueden tener una exposición y una conciencia más limitada de lo que está sucediendo; es conveniente conversar al respecto, si es necesario. Incluso en el caso de los mayores, los padres deben limitar la cantidad de información potencialmente perturbadora que reciben, y establece descansos periódicos (momentos en los que los teléfonos móviles, las tabletas y los televisores se apagan en favor de otras actividades interactivas).
Comunicarse abiertamente con niños y jóvenes dentro de la familia reduce el riesgo de que los niños se enteren de graves y complicados conflictos mundiales sin apoyo ni tranquilidad emocional. Cuando los padres estén listos para sacar a relucir el tema, pueden empezar la plática preguntándoles cuánto saben sobre lo que sucede en el mundo y cómo les hace sentir.
Sus sentimientos importan
Hágales saber que, sin importar lo que sientan, están cuidados y a salvo. Es probable que las situaciones preocupantes les hagan sentir miedo, confusión o culpa, y todas esas cosas son válidas. Si hacen preguntas específicas, complete los espacios en blanco con suficiente información para que se sientan cómodos sin abrumarlos.
Escucha a tu hijo y, si hace preguntas difíciles sobre cómo los problemas globales pudieran afectar a su familia, valida sus sentimientos y pregúntale qué es lo que más teme y, al mismo tiempo, hazle saber que está bien cuidado en familia.
Para niños mayores y adolescentes, hablar sobre problemas o política globales puede llevar a discusiones sobre qué parte tiene razón y cuál no. No temas explicarles que las respuestas simples no son fáciles en la vida real y que los conflictos globales, e incluso los problemas en su comunidad, pueden ser complicados. Aunque es importante enseñar que se deben respetar todas las opiniones, los padres también pueden aprovechar la oportunidad para reflexionar sobre sus propios valores y creencias.
Lo que tú y ellos pueden hacer
La comunicación y el diálogo allanarán el camino para que tus hijos manejen estos problemas, pero las distracciones y la adopción de acciones específicas son otras formas de tranquilizarlos. Centrarse durante demasiado tiempo en cuestiones preocupantes puede generar una mayor ansiedad sobre los problemas globales, así que asegúrate de brindarles formas para que sus mentes y cuerpos se mantengan activos. El ejercicio, los deportes y los juegos son excelentes maneras de concentrarse en el aquí y el ahora y pueden ser terapéuticos, si los niños parecen abrumados por ciertos problemas. Children's Trust financia programas extracurriculares, de verano y otros programas juveniles gratuitos y de bajo costo que podrían ser de interés para tus hijos. Visita TheChildrensTrust.org/Find-A-Program para encontrar uno cercano.
También puedes alentar y facilitar que tus hijos tomen medidas para ayudar a los necesitados. Los padres pueden encontrar organizaciones e instituciones locales que buscan ayuda voluntaria. Investiga cuidadosamente las opciones para asegurarte de no poner a los niños en una situación demasiado cargada de emociones o contraproducente.
Los padres son los principales defensores y partidarios de sus hijos. Para cuidar mejor su bienestar, es fundamental que primero cuides el tuyo mediante el vínculo con otros padres y la práctica del autocuidado. The Children's Trust ofrece talleres gratuitos para padres en todo el condado como parte de su Parent Club, que ofrece muchas herramientas que padres y cuidadores pueden utilizar a fin de ayudar a los niños, tanto pequeños como mayores, a afrontar el crecimiento. Visita TheChildrensTrust.org/ParentClub para inscribirse en un taller gratuito cercano.